no creáis que llego tarde... es que llevo aquí mucho rato delante del ordenador intentando no empezar esta entrada porque sé que es la última y es como resistirme a que termine. Es como no querer irte de la fiesta porque sabes que cuando lo hagas empezarán a pasar cosas. Es no querer cerrar la puerta porque acaban las vacaciones. Es el no querer cerrar un capítulo que tanto bueno me ha dado.
Que conste que soy especialista en tomar decisiones llegado el momento y pasar página pero ahora mismo no querría estar escribiendo este post.
Llevo un buen rato viendo tarjetas en Internet de las que he hecho en estos años para 3flowers y estoy conmovida. Son mis tarjetas pero me he dado cuenta de que algunas de las grandes historias que he vivido y he logrado plasmar en un tamaño tan pequeño de papel han sido para este blog de retos. Por eso sé que esta etapa es irrepetible.
Os contaré algo. Cuando conocí 3flowers yo no me enteraba muy bien quién era Andrea o si ella era la que proponía los retos. De hecho, no sabía que Andrea tenía a parte otro blog. Tampoco sabía si era ella o las otras componentes del DT quienes los lanzaban. Vamos, que no me enteraba de nada.
Tanto es así que cuando las DTs que había justo antes de nosotras anunciaron en el blog que dejaban el equipo yo pensé, ala, ¿y entonces quién queda? Vamos, despiste total. Y luego estaban las "florecillas secretas". Pero... ¿y por qué secretas? Y... ¿qué hacían? Y claro, luego llegamos al blog y entendimos todo. Y para esa parte del equipo también tengo preparada una tarjeta que enviaré con las demás... pero no seré yo quien desvele el secreto mejor guardado de 3flowers enseñándo cuál es la que voy a enviar. Pero desde aquí GRACIAS gigante porque sin esas "florecillas" habría sido difícil sacar adelante los retos.
Y bueno, es ahí donde descubrí que 3flowers era Andrea en esencia y estado puro. Y aluciné. Ese torbellino con patas que no sé cómo puede tirar del corazón tan grande que lleva en el pecho. No lo digo por los grandes actos solidarios scraperos que ha montado sino por su parte más íntima, esa que no se ve y que es la más grande que tiene. Desde luego, Miguel se ganó la lotería con ella ;)
Creo que es una persona tan especial que habrá momentos donde pueda haber gente que no "se la crea" porque es difícil encontrar gente así. Yo me he encontrado muy pocas. Pero sí, os digo que es lo que se ve. No hay más.
Llegar al equipo supuso para mí algo que no ha sido igual en ningún otro sitio donde he estado a pesar de lo bien que me he sentido en todos los demás. El estar en un equipo de diseño donde lo haces porque sí, por el placer de scrapear, sin recibir ni esperar nada material a cambio, te da un grado de libertad difícil de explicar. Y eso hoy día no existe. En todos los Equipos de Diseño trabajas con unos requisitos, que ya sean más o menos estrictos, te condicionan tu trabajo final.
Pero no creáis, todo no es así de bonito. Yo he estado a punto de darme el viajecito la norte de España tela de veces para poder estrujarla en persona porque ya os digo yo que algunos retos han sido para matarla. Ro y yo que los comentábamos en tiempo real a veces nos queríamos morir jajaja pero ahora revisando esas fotos me he dado cuenta de que lo que sé es en gran medida a esos retos. Al tener que enfrentarme a técnicas nuevas, usar materiales que igual no habría probado porque no estaban en mi zona de confort, alucinar en colores o en brillos, jajajaja hacernos por una temporada adictas al foil. En fin, que necesitaríamos muchos posts para recordar tantas y tantas cosas.
Ha sido genial participar también en el Mejor Reto del Mundo y me hace feliz saber que esa parte del proyecto va a seguir viva y que la vamos a tomar con mucha ilusión cuando la retomemos pues tendremos mono tarjetil a tope.
Y sí, si ya habéis visto el post en el blog de retos y también en el blog de Andrea, podréis entender un poco mejor algunos de los motivos que le han hecho tomar esta decisión. Creo que es la más acertada aunque me dé mucha pena.
Y hoy esta tarjeta es para ella. Creo que cuando alguien está viviendo un momento así, merece la pena abrazar. Hay poco más que decir. Y quién nos iba a decir que íbamos a destrozar nuestras tarjetas ahora que ella tiene su corazón igual.
Por eso una tarjeta blanquita para enviarle serenidad, un sentimiento grande como ese abrazo que desde aquí le envío, y una estrella que ya vive en su corazón aunque ahora parezca que lo tiene "troquelado".
Y por supuesto, un GRACIAS gigante porque gracias a Andrea y a este blog puedo decir que "Soy tarjetera".
Y le dedico esta canción con la que me despido de su querida abuelita.